Portugal anunció el viernes la próxima apertura de una licitación de licencias para la exploración de litio en seis regiones de este país, que posee las mayores reservas europeas de un metal esencial para la transición energética.
La subasta, que se lanzará en un plazo de dos meses, incluye seis de los once yacimientos potenciales identificados. Los otros cinco quedaron fuera de la puja por razones ambientales, explicó el ministro de Medio Ambiente, Joao Pedro Matos Fernandes, en una conferencia de prensa en Oporto (norte).
Las concesiones de exploración, que tendrán un plazo de cinco años, deben dar lugar en caso de detección del metal a proyectos mineros que se sumarán a los tres yacimientos ya detectados en Portugal.
El proyecto más avanzado, conducido por la sociedad británica Savannah en la comunidad de Boticas (noreste), aguarda la autorización de la Agencia Portuguesa del Medio Ambiente para iniciar sus actividades.
La próxima subasta exigirá incluir en las propuestas un "proyecto industrial" para que el litio extraído sea tratado en el país.
"Ni un gramo de ese litio será tratado fuera de Portugal", afirmó el ministro Matos Fernandes.
El litio, junto al cobalto y el níquel, son metales esenciales para la fabricación de las baterías eléctricas llamadas a sustituir los motores térmicos de los automóviles para combatir el calentamiento climático.
La Unión Europea trata de abrir sus propias minas y refinerías para reducir su dependencia de la importación de litio de China.
El grupo petrolero portugués Galp Energia y el fabricante sueco de baterías Northvolt anunciaron en diciembre un acuerdo para construir en Portugal una de las primeras refinerías de litio en Europa.
El litio se extrae principalmente en Australia y Sudamérica (Argentina, Bolivia y Chile), en tanto que China refina un 60% de este "oro blanco" de la transición energética, transformándolo en carbonato o hidróxido de litio.
En Europa, se detectaron yacimientos en Portugal, Serbia, Alemania, República Checa y Francia.