José Luis Camacho Acevedo
Después de que celebraron su reunión los
dirigentes del PRI, Alejando Moreno; del PAN, Marko Cortes; y del PRD, Jesús Zambrano
con los dirigentes de la organización antiderechista y antilopezobradorista Sí
por Méxic Gustavo de Hoyos y Claudio X. Gonzales.
La Rayuela de la Jornada fue contundente:
“Ahora si ya esta claro: ya sabemos quienes
integran la nueva derecha en México”.
Tratando de recuperarse del demoledor resultado
negativo que sufrieron en los comicios del 2018 ante Morena, esos partidos que
ahora conforman la chiquillada se unen a Sí por México, una organización de
claros perfiles ultraderechistas para tratar de recuperar fueros y privilegios.
Extraño la ausencia del partido Movimiento Ciudadano
al que Dante Delgado está conduciendo hábilmente hacia un reencuentro con su
antiguo aliado Andrés Manuel López Obrador.
El hecho de que un partido de izquierda como el
PRD u otro centrista como se define al PRI hayan abrazado los lineamientos y
las propuestas de la organización Si por México manda un mensaje a sus militantes,
de que ya no se conducen en base a sus ideologías, sino que sus pactos son esencialmente
pragmáticos.
Tenemos en el panorama electoral un espectro de
partidos que se conformara en identificados bloques.
Ya están los nuevos ultras del PRI, PRD y PAN
unidos.
Seguramente el Partido Verde, Partido del
Trabajo y Movimiento Ciudadano serán aliados de Morena en el 2021.
Ese pragmatismo se verá reflejado en casos como
en la muy previsible candidatura de Gustavo de Hoyos al gobierno de Baja
California.
Fueron precisamente los representantes de la
Coparmex en diversas entidades de la República, los que cabildearon con los
mencionados partidos que ahora se unen a Sí por México.
La disputa por las gubernaturas y diputaciones
federales el próximo año, así como la de importantes alcaldías como las de León,
Guadalajara, Monterrey y Tijuana, por solo mencionar algunas, estará matizada
por una disputa en la que jugarán intereses personales y de grupo contra un
antilopezobradorismo que apenas acaba de resolver la sucesión que ahora
encabeza Mario Delgado.
El fin de las ideologías esta a la vista
EN TIEMPO REAL
1.- El gobernador de Quintana Roo, Carlos
Joaquín González, anunció que aceptó la separación del cargo de secretario de
Seguridad Pública de la entidad de Alberto Capella, tras el operativo en el que
manifestantes fueron dispersados a balazos frente al palacio de Gobierno de
Cancún.
En un mensaje a través de sus redes sociales,
el ejecutivo estatal aclaró que el cese transcurre mientras la Fiscalía General
determina el grado de responsabilidad del funcionario, como coordinador del
Mando Único en Cancún, en donde la policía municipal disuadió una protesta por
el feminicidio de Bianca Alejandrina, "Alexis".
Por su parte, Alberto Capella señaló que la
decisión de separarse de su cargo como Secretario de Seguridad Pública del
Estado es para actuar con transparencia en las investigaciones que se
iniciaron.
2.- No existe ningún documento oficial firmado
por el presidente Andrés Manuel López Obrador donde haya dado instrucciones al
canciller Marcelo Ebrard y a la embajadora Martha Bárcena para no felicitar a
Joe Biden por su virtual triunfo en las elecciones de Estados Unidos.
Son puras especulaciones de un nacionalismo
chabacano.
3.- Sabina Berman y John Ackerman, conductores
del programa “John y Sabina” de Canal Once, protagonizaron un desencuentro
durante la emisión de este martes, la cual contó con la participación del
Secretario de Educación, Esteban Moctezuma.
En dicho programa, la escritora acusó al
investigador de mantener una actitud machista por no cederle la palabra; no
obstante, éste lo negó y Moctezuma tuvo que mediar entre ambos conductores.
Moctezuma no tuvo más opción que mediar. “Yo
creo que es muy importante que lo expreses, Sabina. Creo que ese es el primer
paso. John es un hombre sensible. Es un hombre que va a entender lo que está
diciendo”. Ackerman se limitó a decir que el micrófono estaba abierto.
Posteriormente, Berman retomó el tema de educación a distancia para seguir con
el programa.