Investigadores de la Universidad Johns Hopkins del área de medicina encontraron evidencia de que el farnesol podría ayudar a prevenir y revertir el daño cerebral relacionado con la enfermedad de Parkinson.
El farnesol es un compuesto que se encuentra naturalmente en hierbas, bayas y otras frutas. Es utilizado en la elaboración de aromas y perfumes.
Sin embargo, investigadores de Johns Hopkins Medicine señalan pruebas realizadas en ratones demostraron que el farnesol puede prevenir la pérdida de neuronas que producen dopamina en el cerebro, las cuales al perderse afectan el movimiento y la cognición, lo que provoca síntomas característicos de la enfermedad de Parkinson, como temblores, rigidez muscular, confusión y demencia.
Además, el farnesol tiene la capacidad de desactivar la proteína clave, llamada PARIS, que participa en la progresión de la enfermedad, con lo cual, dicen los investigadores, se podría guiar el desarrollo de nuevas intervenciones contra la enfermedad de Parkinson que se dirijan específicamente a esta proteína.
“Nuestros experimentos demostraron que el farnesol previno significativamente la pérdida de neuronas de dopamina y revirtió los déficits de comportamiento en ratones, lo que indica su potencial como tratamiento farmacológico para prevenir la enfermedad de Parkinson”, dijo Ted Dawson, MD, Ph.D, director del Instituto Johns Hopkins de Ingeniería Celular y profesor de neurología en la Facultad de Medicina de la Universidad Johns Hopkins.
De acuerdo con los expertos, una acumulación de PARIS en el cerebro de las personas con enfermedad de Parkinson, ralentiza la fabricación de la proteína protectora PGC-1 alfa, encargada de proteger a las células del cerebro de las moléculas reactivas de oxígeno dañinas que se acumulan en el cerebro.
“Sin PGC-1alpha, las neuronas de dopamina mueren, lo que lleva a los cambios cognitivos y físicos asociados con la enfermedad de Parkinson”, señalaron los investigadores.