Cuando el Gran Circo se traslada a Medio Oriente para las últimas citas de la temporada, el campeonato de pilotos y el de constructores están en el aire, con una batalla intensa entre Max Verstappen y Red Bull ante Lewis Hamilton y Mercedes, una disputa que ya cumplió 20 fechas, pero a la que le falta la parte más emocionante.

Justo en el año previo al cambio de reglas que tendrá la Fórmula 1 en 2022, el holandés y la escuadra austriaca, con la ayuda del mexicano Sergio Pérez, han puesto en jaque el dominio de las flechas plateadas, que han conquistado todos los títulos de conductores y de equipos desde el inicio de la era híbrida, en 2014.

Sin embargo, cuando todo parecía a favor de Red Bull tras los éxitos en Norteamérica (Estados Unidos y México), la llegada de un nuevo motor para Hamilton lo ha devuelto a la pelea, al ganar en Brasil y en Catar, por lo que es momento de hacer cuentas tanto para el siete veces campeón como para Max, de cara a la definición de una campaña apasionante en la máxima categoría.

Las fechas de Arabia Saudita y Abu Dhabi repartirán hasta 52 puntos para el piloto que logre imponerse (25 cada uno) y dejar la vuelta rápida en carrera (1 por prueba), por lo que la ventaja de ocho unidades que tiene Verstappen no es decisiva.

El liderato sigue en manos del holandés, quien acumula 351.5 puntos después del Gran Premio de Catar, mientras que su máximo rival está por detrás con 343.5, pero tras el triunfo del británico en Losail, si alguno se impone en los dos eventos restantes será el campeón, sin importar lo que haga su adversario.

En las cuentas de Verstappen, una victoria (y el mejor giro) en una de las dos fechas siguientes prácticamente lo coloca en el trono porque sólo tendría que ser quinto en la otra (10 unidades) para quedar por delante de Lewis, puesto que llegaría a 387.5, mientras que su rival también llegaría a 387.5 (con 18 por un segundo y el triunfo con punto extra), pero el criterio de más victorias (hoy 9 a 7 para el de Países Bajos) le favorece al hijo de Jos.

En otro escenario, si Max logra imponerse en Arabia Saudita en la siguiente parada y el británico no suma, será campeón, sin importar lo que suceda en Abu Dabi; lo que no aplica en el caso de inglés porque si gana y obtiene el punto extra, sólo le llevaría 18 unidades a su rival, quien todavía tendría una pequeña esperanza.

Si Max no volviera a ganar, pero consiguiera otros dos segundos puestos, llegaría a 387.5, por lo que necesitaría que un piloto distinto se imponga en alguna de las citas, para dejar a Hamilton con 385.5 (un triunfo y un tercero y dos mejores giros, dan 42).

“Ha sido así todo el año, subidas, bajadas, estar a la caza, de nuevo estar al frente, así que todos sabemos que muchas cosas pueden pasar todavía”, se resignó el holandés, después de ser segundo en Brasil y de cara a lo que viene por delante.