José Luis Camacho Acevedo
Cuando el actual gobernador de Quintana Roo,
Carlos Joaquín González, decidió postularse como candidato por una coalición
integrada por el PAN, MC y PRD me permití comentarle que, basado en la
información de encuestas que yo había revisado, él ganaría porque los electores
de su entidad estaban decididos a votar por el nombre de un personaje
radicalmente distinto al perfil de Roberto Borge Angulo y no por las siglas de
un partido cualquiera.
Eran momentos en que la entidad estaba sumida
en un caos de corrupción; tenía un brutal endeudamiento público, complicidades
inconfesables de3l poder público con el crimen organizado, manifestaciones de
nepotismo, impunidad y peculados tan descarados que resultaron imperdonables
para los ciudadanos de Quintana Roo.
Carlos Joaquín González ganó las elecciones con
un margen tan holgado que fue un referente del repudio popular que existía al
corrupto gobierno de Roberto Borge, apadrinado siempre por el exmandatario Félix
González Canto.
Mañana Carlos Joaquín González rinde su cuarto
informe de gobierno con resultados alentadores, aún en medio de la crisis de
salud y económica que ha traído consigo la pandemia del Covid-19, que presagian
una etapa de recuperación integral para Quintana Roo.
En el estado se ha reducido la deuda pública de
una manera muy importante; la seguridad pública ha ganado terreno al crimen
organizado gracias a la experiencia y valentía de Alberto Capella; la
reactivación económica ya está siendo apreciada por los prestadores de
servicios turísticos de la zona más concurrida de la Riviera maya.
El elemento diferencial entre el pasado negro
de los corsarios del Caribe, encabezados por Beto Borge, y el actual régimen
que tiene al frente a Carlos Joaquín González, es evidente y aplastante: la
sociedad de Quintana Roo tiene por sabido que Borge fue siempre corrupto y
corruptor mientras que Carlos Joaquín es un mandatario honesto que se ha ganado
el respaldo popular por la transparencia de sus actos de gobierno.
En una forma por demás eficaz, el actual
encargado de la comunicación social de la entidad, Carlos Orvañanos Rea, ha
sabido proyectar los resultados que presentará Carlos Joaquín González en su
cuarto informe de gobierno respaldando la promoción en opiniones de los
ciudadanos que reflejan su complacencia de, en solo cuatro años, haber cambiado
de una forma de vida que amenazaba su integridad física y su patrimonio, a una
convivencia social basada en el respeto a las leyes, a la ecología y a los
derechos humanos.
Con los resultados que presentará mañana en su
cuarto informe de gobierno Carlos Joaquín González, la sociedad de Quintana Roo
seguramente reconocerá con amplitud que los hechos siempre serán un mensaje más
convincente y claridoso que la demagogia que disfraza la falta de compromiso
social con la mascarada del discurso fácil y mentiroso.
EN TIEMPO REAL.
1.- Fuerza
Social por México seguirá su proceso de convertirse en partido político
nacional con el objetivo de generar una oferta política a la altura de los
retos y circunstancias que hoy demanda nuestro país. Cumplimos todos y cada uno
de los requisitos que establece toda la normativa para la formación de nuevos
partidos.
Impugnaremos la decisión del INE de negarnos el
registro ante la Sala Superior del Tribunal Electoral. Confiamos en la máxima
autoridad electoral del país, que como Tribunal Constitucional tiene la altura
democrática y jurídica para otorgar lo que en derecho nos corresponde. Así lo
externó Gerardo Islas Maldonado. Presidente de la Asamblea Nacional de Fuerza
Social.
2.- Santiago Nieto Castillo externó nuevamente
que no pretende ser candidato a la gubernatura de su natal Querétaro. Ante un
grupo de organizaciones sindicales y organizaciones sociales el titular de la
Unidad de Inteligencia Financiera dijo que, a pesar de que el presidente López
Obrador abrió la puerta a sus funcionarios para que pudieran competir en los
comicios del año próximo, por lo pronto su tarea está concentrada en apoyar al
primer mandatario en su cruzada contra la corrupción.
3.- El presidente nacional del PRI, Alejandro
Moreno Cárdenas, está decidido a recuperar para su organización la capacidad
crítica que favorezca el desarrollo democrático y sin corrupciones de nuestro
país. El político campechano descalificó los “circos mediáticos” como el que se
construye con el caso Odebrecht. Dijo Moreno Cárdenas, que la paguen los que la
hicieron y los que la deben. El PRI no tiene por qué cargar con culpas del
pasado, así las hayan cometido quienes fueron militantes del tricolor.