A través de un mensaje en sus redes sociales, al aspirante a
la dirigencia nacional de Morena indicó que si Andrés Manuel López Obrador “no
fuera Presidente, hubiera hecho campaña y revertido la situación”, por lo que
urgió la reorganización del partido como la que ha propuesto.
En contraste, otros morenistas se lanzaron contra la
dirigencia interina de Alfonso Ramírez Cuéllar, al responsabilizarlo de los
malos resultados obtenidos en esas dos entidades.
Los primeros en arremeter contra la actual dirigencia
encabezada por Ramírez Cuéllar fueron Antonio Attolini, hoy aliado de Mario
Delgado, y Alejandro Rojas Díaz Durán, quien afirmó que “los desastrosos
resultados son el reflejo de la falta de liderazgo democrático, dedazos e
imposiciones de la nomenclatura”. Además, acusó que es urgente la renovación
del partido, porque “nos pueden hundir en 2021”.
Por separado, Alfonso Ramírez Cuéllar rechazó que lo
ocurrido en Coahuila tenga que ver con las divisiones del partido, sino una
operación generalizada de compra del voto.
“Es un problema de una entidad caracterizada por prácticas
que violentan la libre votación y de una operación generalizada de compra del
voto”, mencionó.
Aseguró que hay resultados positivos para Morena en Hidalgo,
de gobernar un municipio, podrían llegar a por lo menos cinco, pero habrá que
esperar a que concluyan los conteos distritales. En tanto, en Coahuila, donde
no hubo un solo triunfo, acusó que hubo una operación de compra y coacción de
votos, lo que inhibió la participación ciudadana.