Casi intactos, así llegarán los Tampa Bay Buccaneers, actuales campeones de la NFL, a la próxima temporada, después de firmar a otro elemento que fue fundamental para ganar el Super Bowl LV: el ala cerrada Rob Gronkowski.
Después de negociar con Tom Brady y de amarrar a otros jugadores en el roster, este lunes la franquicia confirmó que Gronk se queda en el equipo para buscar el doblete en 2021.
El contrato se hizo por un año a cambio de 10 millones de dólares. Aunque Gronk en algún momento vio qué tanto le ofrecían en la agencia libre, en realidad siempre quiso mantenerse en los Bucs.
El binomio entre Tom Brady y Gronkowski funcionó tal y como lo hacía en los New England Patriots, aunque el ala cerrada comenzó flojo, al final se apuntó un par de recepciones de anotación en el Super Bowl LV, donde destronaron a los Kansas City Chiefs.
Gronk, además, atrapó 45 pases para 623 yardas y siete touchdowns en la temporada.
La firma del jugador se une a la de Chris Godwin, a quien le colocaron la etiqueta de jugador franquicia, además de Shaquil Barrett, que también estará de vuelta con los Bucs tras pactar por cuatro años a cambio de 72 millones.