José Luis Camacho Acevedo

En Sinaloa “levantaron a tres familias en comunidades pertenecientes al municipio de Culiacán. Las sacaron de sus casas, incluidos niños, en la madrugada y se los llevaron con destino desconocido. Ante ese hecho terrible y condenable, el gobernador de Sinaloa, Rubén Rocha Moya, declaró con sanguinario cinismo: “Son cosas que suceden”.

Increíble declaración cuando Sinaloa es territorio en disputa por los Chapitos y el Mayo Zambada, organizaciones que son las que verdaderamente gobiernan la entidad.

En Campeche la inefable Layda Sansores ordenó un operativo a la titular de Protección y Seguridad Ciudadana, Marcela Muñoz, en el penal de Kobén cuyo resultado fue el de más de treinta policías lesionados que no fueron atendidos a tiempo por los servicios de salud campechanos.

Layda, con el cinismo que la caracteriza, se lanzó a preparar una marcha de apoyo, tanto a ella como a la funcionaria de seguridad mencionada.

Ante las dimensiones de la protesta popular de esa marcha en apoyo a Layda, la protagónica mandataria decidió suspenderla y dio de baja a dos mandos policíacos de nivel medio: la subsecretaria de Natasha María Bidault y de Antonio Saradán Solís por estar al frente de los elementos que participaron en el fallido operativo.

En Guerrero la gobernadora Evelyn Salgado dejó de supervisar el reparto de ayudas a las zonas más pobres de Acapulco, donde se especula que funcionarios estatales e incluso mandos militares, han saqueado las despensas destinadas a los damnificados.

Evelyn Salgado, igual que Layda, se concretó a despedir a su secretario general de gobierno y al titular de seguridad pública u, en medio de un fuerte regateó, a la fiscal general del Estado.

La guerrerense sigue sin que sus elementos de seguridad encuentren al asesino del normalita Yanqui Kothan. Y mientras ella no se refiere al caso ni por equivocación.

El cinismo de Rubén Rocha Moya, de Layda Sansores Sanromán y de Evelyn Salgado son la muestra fehaciente de que al amparo del poder, como dice su presidente López Obrador, “a mi no me vengan con eso de que la ley es la ley”, pueden gobernar con total impunidad.

Estamos a cerca de 70 días de que se celebren las elecciones más grandes de la historia de México y las condiciones de un mal gobierno no cambian: impunidad, corrupción, desprecio por las instituciones y humillaciones diarias a la población que demanda justicia son el verdadero sello de la desastrosa Cuarta Transformación.

EN TIEMPO REAL.

1.- En España un despacho de abogados del cual varios de sus integrantes están cursando los posgrados de derecho penal en la ameritada universidad de Sevilla, uno de ellos asegura que la empresa Televisa está en riesgo de ser imputada por falsedad de declaraciones en contra del ex director de la CNBV, Eduardo Fernández. La empresa que vive una gran crisis financiera, es recordada por su proclividad a falsear declaraciones e incluso a construir montajes en contra de quienes considera son sus enemigos.

2.- Aunque usted no lo crea, el perdido candidato presidencial de Movimiento Ciudadano, mandó inscribir en el registro de marcas a nivel federal, la marca “MÁYNEZ” por el riesgo de que se la fueran a plagiar Claudia Sheinbaum o Xóchitl Gálvez.

3.- En reuniones “secretas” el magistrado Felipe Alfredo Fuentes Barrera y el gobernador queretano Mauricio Kuri, insisten en bajar como candidato al senado al popular Santiago Nieto Castillo, con el superado argumento de la residencia. Nieto Castillo, quien seguramente logrará que ganen su tierra natal, San Juan del Río, tanto los candidatos morenistas a diputados federales y locales y por supuesto al aspirante a la alcaldía, ni suda ni se acongoja ante los embates del corroído gobernador Kuri, quien, ese sí, ni es nativo de Querétaro.