EFE.- Banco Sabadell y Telefónica Movistar lanzaron el programa piloto de un servicio 100% digital para dar crédito a los clientes de la empresa de telecomunicaciones, informó este lunes Sabadell.
"Movistar y Banco Sabadell lanzan en México una prueba piloto del servicio de créditos al consumo: ‘Movistar Money’, la primera colaboración entre una institución bancaria y una empresa de telecomunicaciones en el país”, destacó el banco de origen español en un boletín.
Según el comunicado, este nuevo servicio ofrecerá a una “base limitada” de cliente de Movistar la posibilidad de adquirir un crédito de 45,000 pesos de forma “fácil, ágil y segura”.
“Esta iniciativa de Telefónica forma parte de los nuevos servicios digitales que la compañía desarrolla, y que en conjunto con el ‘expertise’ del negocio financiero de Banco Sabadell y bajo un esquema de innovación, busca disminuir la brecha digital y financiera en el país”, indico el Sabadell.
A su vez, Daniel Porras, director de Estrategia de Telefónica Movistar México, consideró este nuevo producto como parte de la “democratización” de los servicios digitales, y tiene como objetivo también “avanzar en la diversificación y el crecimiento” de esta compañía filial de la española Telefónica.
“El 2020 nos ha dejado con una mayor adopción digital, lo que supone una oportunidad única para la bancarización del país. En Banco Sabadell tenemos como prioridad innovar en modelos de relación con el apoyo de ‘partners’ estratégicos como Movistar para ofrecer soluciones bancarias y tecnológicas, indicó Emmanuel Got, director ejecutivo de Desarrollo de Negocio en Banco Sabadell.
“Si la prueba resulta exitosa, se tiene intención de ampliar la oferta del servicio a una mayor proporción de clientes Movistar”, concluyó el boletín del Sabadell, que desde 2015 opera como banco comercial en México.
Según los últimos datos disponibles, los correspondientes al tercer trimestre de 2020, el Sabadell registró en México un beneficio neto de 14 millones de euros (unos 17 millones de dólares) , y sumaba una inversión crediticia viva de 3,543 millones de euros (unos 4,278 millones de dólares) hasta septiembre.