José Luis Camacho Acevedo
Tomando el párrafo inicial de la columna que Raymundo Riva Palacio publicó en El Financiero en la que agrede a Santiago Nieto Castillo(Hacía mucho tiempo que Santiago Nieto ya no daba de qué hablar, ayudándose, quizá sin darse cuenta, a él mismo. Pero amante de los reflectores y del protagonismo, volvió a abrir la boca y quién sabe si su candidez le ayude a quien lo rescató de la ignominia, el gobernador de Hidalgo, Julio Menchaca, al hacerlo procurador, o la corcholata a la que está respaldando, Marcelo Ebrard. En ambos casos los mete en un pleito que no es de ellos, pero que podría tener consecuencias por la lengua suelta de Nieto, quien definitivamente no ha aprendido nada de su experiencia.) inicio mi columna considerando que esa entrega revela porque el escribidor en cuestión también hacia tiempo que ya no daba nota con sus entregas.
Riva sin un interés político mayor detrás de sus otros datos, hacen ver que son simplemente apuntes sin el mayor interés para los jugadores de primer nivel dentro de Morena.
Efectivamente el extitular de la UIF, Santiago Nieto, dio recientemente una entrevista a la plataforma televisiva de Milenio.
El contenido de la entrevista, misma que estuvo llena de información que generó polémica, avivó la batalla entre las llamadas corcholatas morenistas y hasta incluyó detalles de los avances en las pesquisas que se siguen en Hidalgo por la denominada “Estafa Siniestra”.
Primero, Nieto Castillo reiteró su apoyo al excanciller Marcelo Ebrard en su búsqueda de la candidatura presidencial, pues fue éste quien lo acercó a la llamada cuarta transformación para aportar en materia de combate a la corrupción y delitos electorales. La mencionada expresión de lealtad no fue bien recibida en el equipo de otra de las aspirantes cuartotransformistas.
El ahora encargado de la Procuraduría de Hidalgo habló largo sobre las acciones de combate a la corrupción en el estado gobernado por Julio Menchaca, sobre todo en la metodología que ha permitido llevar ante la justicia a funcionarios clave de la administración del priista Omar Fayad por un desvío de más de 520 millones de pesos.
En el diálogo con sus entrevistadores, Nieto abundó también sobre el escándalo que se generó por su boda en Guatemala a finales del 2021. Dio detalles sobre el “fuego amigo” y “fuego enemigo”: el primero lo atribuyó a la FGR, aunque aseguró guardar ahora una estrecha relación y coordinación con esa institución para la resolución de varios casos de interés nacional; el segundo, sin dudarlo lo atribuyó al equipo cercano al exgobernador de Tamaulipas, Francisco García Cabeza de Vaca, con quien incluso mantiene una pública y notoria confrontación hasta la fecha.
Riva Palacio, con su narrativa escurridiza nunca ha dado paso sin huarache, una vez más hace obligada una pregunta: ¿Ahora el mensaje viene de parte de quién?
Seguramente esa columna de Riva no tendrá un seguimiento inmediato.
Como siempre, el columnista de El Financiero volverá a enseñar la oreja de quien resulte ser su nuevo cliente.
Hasta allí llegará el interés del público por los otros datos de Riva Palacio.
¡Asnos Dios de tu rebaño!
