Decenas de servidores públicos de la Secretaría del Trabajo
y Previsión Social (STPS) comenzarán a partir del próximo lunes a retomar
gradualmente sus labores de manera presencial en oficinas, pero sin utilizar
computadoras que la dependencia arrendaba para que desempeñaran sus funciones.
Como parte del recorte del gasto del gobierno impulsado por
la Presidencia y la Secretaría de Hacienda, la STPS —dependencia que debe velar
por los derechos de los trabajadores— implementó medidas de austeridad que van
desde el retiro de computadoras a la mayoría de los funcionarios hasta la
reducción a la mitad del consumo de agua de garrafón y la “recomendación” de
que no carguen la batería de sus celulares en las tomas de corriente de las
oficinas, de acuerdo con testimonios de trabajadores y documentos internos.
Otra medida tomada fue cancelarles plazas de base a funcionarios
y hacerlos firmar nuevos contratos en los que son reconocidos como trabajadores
eventuales para lo que resta del año.
Las medidas de austeridad adoptadas por la STPS fueron
aplicadas a todas las áreas de la institución, pero afectaron especialmente a
servidores públicos que operan el programa estrella de la actual
administración, Jóvenes Construyendo el Futuro.
Este jueves retornarán al trabajo mandos superiores, mandos
medios y enlaces de la secretaría que no padezcan vulnerabilidades ante el
COVID-19, con la encomienda de devolver las computadoras que les asignó la
institución y llevar a la oficina sus propios equipos.
La decisión de retirar los equipos de cómputo fue comunicada
por la Dirección General de Tecnologías de la Información de la STPS el 28 de
mayo a los subsecretarios, jefes de unidad, directores generales y enlaces
administrativos.
Mediante la circular 513/001/2020, el titular de dicha área,
Juan Carlos Herrejón Rentería, pidió a los mandos enviar un reporte de los
equipos que fueran “susceptibles” de ser “recortados”.
“(Se debe) identificar e informar de manera inmediata a la
Dirección General de Tecnologías de la Información aquellos bienes y
servicios en materia de Tecnologías de Información —en particular:
computadoras, impresoras, extensiones telefónicas, etc.— que, derivado de la
presente emergencia sanitaria, son susceptibles de ser dados de baja por uso,
por lo cual deberá de remitir (…) la relación de equipos y usuarios
resguardantes para poder realizar el recorte correspondiente”, indica el
oficio.
En el mismo documento se pidió que al interior de las
oficinas se compartieran los equipos entre varios usuarios, contra la
recomendación sanitaria de evitar el intercambio de herramientas de trabajo
para reducir el riesgo de contagio del nuevo coronavirus.