El Grupo Parlamentario de Morena en el Senado de la República, presentó un punto de acuerdo con el que se hace un exhorto a la Comisión Nacional del Agua para que dé a conocer los lineamientos, normas oficiales mexicanas y demás ordenamientos legales vigentes en materia de exploración y extracción de agua geotérmica para la generación de energía.
En la exposición de motivos del punto de acuerdo presentado por el senador Rafael Espino del Peña de Morena, precisa que “la transición energética en México representa un desafío para la transformación de México, es una tarea fundamental que desde diversos ámbitos debemos trabajar para lograr su absoluta consolidación en favor del Estado mexicano”.
El documento refiere que en la actualidad “existen voces en diversos foros y espacios en el ámbito nacional e internacional, la apuesta hacia el futuro como país es logar la soberanía energética y por ende la seguridad de esta, para ello, es necesario identificar definiciones” iniciando con los conceptos de seguridad y soberanía energética.
Y refiere: “la definición más clara de seguridad energética es la de la Agencia Internacional de Energía (AIE), que define el concepto de seguridad energética como la disponibilidad ininterrumpida de fuentes de energía a precios asequibles”.
Asimismo, apunta que la Soberanía Energética se puede entender cómo “… el derecho a tomar decisiones sobre la energía, entendida como un bien común y como la base de vida digna para las personas. La soberanía energética no sólo se replantea la forma de producción, sino que busca reconfigurar la escala, la propiedad, el uso y la gestión de la energía. Es decir, presenta a la energía como un bien común, no como uno público o privado”.
Por ello, refiere el documento que hacer la distinción entre seguridad y soberanía energética resulta fundamental para estar en posibilidad de valorar el punto de acuerdo, a efecto de, poder identificar con base en esos conceptos, la situación en la que se encuentra el sistema energético de México.
En el documento, el senador Espino de la Peña asegura que la transición energética es una tarea compleja para gobierno de México, “derivado del modelo heredado en la reforma energética más reciente de 2013, dentro del cual se privilegió la participación privada, al grado de que, las diversas actividades del sistema eléctrico recaen hoy en día, en la actividad privada, situación que no debe ni puede ser sostenida desde ese supuesto, toda vez que, es una actividad estratégica, prioritaria y de seguridad nacional.
Por ello, advierte que no es factible ni pertinente que, “la actividad eléctrica en todos sus procesos -generación, conducción, transformación, distribución y abastecimiento- quede fuera de la rectoría del Estado, principalmente, por ser una actividad que le permite a México preservar la seguridad y soberanía energética, salvaguardando la seguridad interior, la gobernabilidad y democracia del país.
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