Pese a dar el banderazo de salida para el inicio del tapering a partir de fines de noviembre, el Comité Federal del Mercado Abierto (FOMC, por su sigla en inglés) de la Reserva Federal dejó sin cambio la tasa entre 0 y 0.25 por ciento.
Tras divulgar el séptimo anuncio monetario del año, el presidente de la Fed, Jerome Powell detalló, en conferencia de prensa, que “la decisión del tapering en las compras de activos no otorga ninguna señal directa sobre la política de tasas de interés.
Este no es aún un momento oportuno para subir las tasas de interés porque queremos ver que el mercado laboral siga fortaleciéndose”, subrayó.
El banquero central solicitó paciencia a las familias ante la escalada de precios que sí se ha presentado, sobre todo en alimentos y algunos servicios y explicó que la creación de empleo está ajustándose. Precisó que la gente que está colocándose en el mercado laboral está percibiendo mayores ingresos que los previos a la pandemia, lo que indica un fortalecimiento de las condiciones de trabajo.
Esta misma situación está motivando una mayor demanda que también está presionando a los precios, argumentó.
De acuerdo con analistas de Banorte, pese a la posición de Powell, el comunicado mostró ajustes relevantes sobre el panorama de la inflación.
“Notamos mayor preocupación sobre la inflación. Si bien volvieron a destacar que ha subido principalmente por efectos transitorios, agregaron que esperan que así siga, lo que denota mayor escepticismo sobre la permanencia y naturaleza del impacto”.
Sin alcance en origen de inflación
Sobre la inflación, que a septiembre, registró una variación anual de 5.4%, la más alta desde agosto del 2008, sostuvo que obedece a factores que están fuera del alcance de las herramientas de política monetaria.
Reconoció que en el Comité entienden el fuerte impacto que significa para las familias tener precios al alza en alimentos y ciertos servicios, pero detalló que los cuellos de botella en la distribución de insumos de la cadena mundial de suministro son los que están motivando estas alzas.
Por ahora, mantienen el diagnóstico de que la variación al alza de la inflación tiene un origen transitorio ante la interrupción que mantienen la cadena de suministros en el mundo, a causa de las distintas velocidades en el ritmo de vacunación.
Pero aseguró que están siguiendo muy de cerca el comportamiento de los precios y que en el momento que identifiquen un desvío que pueda significar persistencia y consistencia en la inflación utilizarán todas las herramientas a su alcance para enfrentarla.
Temor de que adelanten alza
Mientras se desarrollaba la conferencia del presidente Powell, el mercado de futuros asignó 90% de probabilidad para que la Fed aplique el primer incremento en la tasa de referencia para julio del próximo año.
El economista senior de Oxford Economics, Joan Domene dice que la cautela con la que están actuando los miembros del Comité al esperar mayores datos antes de subir la tasa, evidencia que no quieren cometer errores. Por eso están tomándose tiempo para explicar la naturaleza de la inflación.
En la conferencia, el presidente Powell reconoció que la tendencia que ha mantenido la inflación en aquel país no es consistente con la estabilidad y aseguró que en respeto a su responsabilidad y obligación de rendición de cuentas es que están atentos a la evolución de los disparadores de la presión en la inflación.
Cuanto le preguntaron sobre cómo puede mantener el diagnóstico de presiones transitorias, dijo que no parece una presión persistente y muy prominente.
Por otra parte, un ciclo anticipado de alzas en la Fed pondría presión en Banxico para seguir subiendo tasas más arriba de 5.75 o 6 para fines del 2022.
Si se adelanta el alza de tasas, los mercados emergentes tendrán que acompañar a la Fed, para que el diferencial de tasas no les afecte, advirtió la directora de análisis económico en Banco Base, Gabriela Siller.