Después del COI, turno para el Comité organizador japonés de mostrarse optimista: los Juegos Olímpicos de Tokio, aplazados de 2020 a 2021 debido a la pandemia de covid-19, tendrán lugar “pase lo que pase”, a pesar de la evolución de la crisis sanitaria.
“Tenemos que dejar atrás los debates sobre el hecho de que se disputen o no. La pregunta es cómo los organizaremos”, insistió Yoshiro Mori, presidente del Comité de organización, durante una reunión entre el comité de Tokio-2020 y los responsables del Partido liberal-demócrata (PLD), en el poder en Japón.
“Reflexionemos en esta ocasión sobre un nuevo tipo de Juegos Olímpicos”, lanzó el antiguo Primer ministro, mientras los organizadores nipones ya expresaron su voluntad de hacer de los Juegos de Tokio “un modelo” para ediciones futuras, que podrían también estar confrontadas a crisis sanitarias como la del covid-19.
Las declaraciones de Mori se producen mientras el Primer ministro japonés Yoshihide Suga anunció el martes una prolongación de un mes del estado de emergencia ante la pandemia, decretado en enero en varios departamentos del país (entre ellos Tokio y su periferia) por una duración inicial de un mes.
Un endurecimiento de las condiciones de acceso a Japón para los no residentes ya forzó el aplazamiento de varios eventos deportivos, entre ellos una prueba de natación sincronizada que iba a servir de torneo de clasificación olímpica, aplazada ahora a mayo cuando su fecha prevista era primeros de marzo.