Tras meses de negociaciones y con apoyo bipartidista, el plan de inversión en infraestructuras de 1.2 billones de dólares (trillion, en inglés) impulsado como "histórico" por el presidente Joe Biden fue aprobado este martes en el Senado.
La votación quedó en 69 votos a favor frente a 30 en contra, como anunció la vicepresidenta Kamala Harris, quien se encargó de presidir la sesión para el anuncio de la aprobación.
19 republicanos se unieron a la mayoría demócrata para aprobar el plan, incluyendo al líder de la minoría, Mitch McConnell.
El plan prevé 550,000 millones de dólares en nuevos gastos federales en carreteras, puentes y transporte, así como en internet de banda ancha y en la lucha contra el cambio climático. También incorpora otras partidas presupuestarias ya aprobadas para un total de 1.2 billones de dólares.
"Nuestra economía es la número uno del mundo, pero nuestra infraestructura es la número 13", dijo el líder de la mayoría demócratas en el Senado, Chuck Schumer, en su mensaje final antes de que se procediera a la votación.
"Finalmente, finalmente, hemos llegado a la meta. Por supuesto, nosotros, los demócratas, creemos que hace falta más", dijo Schumer al anunciar que el Senado se moverá a una "un segunda fase" (el proyecto de presupuesto) en el que se incluyen aspectos de política social, energética o ambiental que fueron sacados del texto negociado con los republicanos.
La "estrategia de dos fases" a la que hizo referencia el líder demócrata busca acallar las críticas del sector más liberal del partido que cuestiona que se hayan eliminado esos temas del paquete de infraestructura, algo que podría comprometer la aprobación final de la ley en la Cámara de Representantes.
Horas después el presidente Biden alabó el esfuerzo de negociación en la Cámara Alta y agradeció al grupo bipartidista de senadores "por hacer lo que me dijeron que harían" y aprobar la legislación.
"Estamos en la cúspide de una década de infraestructura que realmente creo que transformará Estados Unidos", dijo el presidente.
Una vez aprobado en el Senado, el texto deberá ser sometido a votación en la Cámara de Representantes. Todavía no se ha fijado una fecha y su aprobación no está garantizada.
La aprobación final del proyecto de ley sería una victoria para el presidente demócrata, quien apuesta a la recuperación económica y la lucha contra los estragos de la pandemia de covid-19 para presentar un buen balance al electorado.
La Oficina Presupuestaria del Congreso (CBO) ha estimado que el plan añadirá 256,000 millones de dólares al déficit entre 2021 y 2031. Este impacto preocupa a varios republicanos que se oponen al plan.
Pero sus partidarios dijeron que la CBO no pudo contabilizar formalmente todos los ahorros e ingresos adicionales previstos y que cubrirán el costo de estas medidas.
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