El presidente Andrés Manuel López Obrador ofreció una disculpa al pueblo chino, esto por una masacre que es poco conocida en la historia de México y que ocurrió durante los primeros años de la Revolución Mexicana.
Se trató del asesinato de 303 chinos en Torreón, la actual capital de Coahuila, que provocó el éxodo de una comunidad que hasta entonces era de las más prósperas en la región.
Según el investigador del consejo académico del Museo Arocena de Torreón, Carlos Castañón Cuadros, "hubo un silencio cómplice de una sociedad que no quiso afrontar o reconocer que fue parte de esa violencia, y la mejor manera de abordar ese terrible suceso histórico fue no hablando de ello".
La comarca lagunera por aquél entonces era una de las regiones agrícolas más productivas del país, y en ella se asentaron familias chinas que huían de la hambruna de sus comunidades, especialmente de la región de Cantón. Otros escapaban de la persecución racial desde Estados Unidos.
Aproximadamente 600 personas conformaban la comunidad china en Torreón. La mayoría eran campesinos, trabajadores y dueños de lavanderías. Aunque también había algunas familias adineradas, que fundaron el principal banco de la ciudad.
Las fuerzas insurgentes llegaron la madrugada del 15 de mayo de 1911 a la comarca. Tras unas horas de combate, los miembros del Ejército federal abandonaban la ciudad, según algunas versiones.