La nueva normalidad y el semáforo verde en Ciudad de México han permitido que la noche del 30 de octubre las luces del Auditorio Nacional brillaran, tras más de un año y medio de no encenderse; la banda colombiana Morat fue la encargada de ofrecer el primer concierto presencial tras el encierro necesario por la pandemia de Covid-19.
Ahora han sido tres mexicanos los que el 11 y 12 de noviembre se volvieron a apoderar del escenario y "despertaron" al Coloso de Reforma. El jueves la famosísima dupla de Emmanuel y Mijares ofreció lo mejor de su repertorio y ayer fue la cantante María José la que encendió el rugido de miles de personas.
Durante las tres fechas se siguieron las normativas establecidas para evitar el contagio: toma de temperatura, uso de gel antibacterial y de cubrebocas en todo momento; así que los gritos y silbidos se escuchaban ligeramente reducidos, pero público y artistas no tuvieron problemas, con tal de seguirse cuidando y que más shows en vivo sucedan.
Una sorpresa más esperaba a los asistentes a estos tres conciertos; el Auditorio Nacional está estrenando dos megapantallas que permiten a todos los asistentes, desde el segundo piso hasta el área de Preferente, no perder detalle de lo que sucede en el entarimado; además de un sistema de sonido y luces completamente renovados.