logo
header-add

Qué les pasaría a nuestros cuerpos si muriéramos en el espacio

por Redacción
28-10-2021

Comparte en

Los viajes al espacio con fines recreativos son una posibilidad cada vez más real y podría llegar un día en el que viajemos a otros planetas de vacaciones o para vivir.

La compañía espacial comercial Blue Origin ya comenzó a enviar clientes al espacio en vuelos suborbitales, mientras que Elon Musk espera establecer una base en Marte con su firma SpaceX.

Esto significa que tenemos que empezar a pensar en cómo será vivir en el espacio y también qué pasaría si alguien muere allí.

Después de morir aquí en la Tierra, el cuerpo humano pasa por una serie de etapas de descomposición. El proceso fue descrito en 1247 un libro de Song Ci, que fue esencialmente el primer manual de ciencia forense.

Primero, la sangre deja de fluir y comienza a acumularse como resultado de la gravedad, un proceso conocido como el livor mortis.

Después el cuerpo se enfría hasta llegar al algor mortis y luego los músculos se ponen rígidos debido a la acumulación incontrolada de calcio en las fibras musculares: este es el estado conocido como rigor mortis.

Posteriormente las enzimas, un conjunto de proteínas que aceleran las reacciones químicas, hacen que las paredes celulares se descompongan liberando su contenido.

Al mismo tiempo, las bacterias de nuestros intestinos escapan y se diseminan por todo el cuerpo. Luego devoran los tejidos blandos: la putrefacción y los gases que liberan hacen que el cuerpo se hinche.

El rigor mortis pasa mientras se destruyen los músculos, se desprenden olores fuertes y se descomponen los tejidos blandos.

Estos procesos de descomposición son factores intrínsecos, pero también existen factores externos que influyen en el proceso de descomposición, como la temperatura, el rol de los insectos, el entierro, la manera en que se depone un cuerpo y la presencia de fuego o agua.

La momificación o desecación del cuerpo ocurre bajo condiciones secas que pueden ser cálidas o frías.

En ambientes húmedos sin oxígeno, se pueden dar la formación de adipocira (una sustancia similar a la cera orgánica), pues el agua puede causar la descomposición de las grasas a través del proceso de hidrólisis.

Este recubrimiento similar a la cera puede actuar como una barrera sobre la piel para protegerla y preservarla.

Pero en la mayoría de los casos, los tejidos blandos finalmente desaparecen y revelan el esqueleto. Estos duros tejidos son mucho más resistentes y pueden sobrevivir miles de años.

Pero, ¿qué pasa con la muerte afuera de nuestras fronteras terrestres?

La distinta gravedad que otros planetas tienen afectaría la etapa del livor mortis. La falta de gravedad cuando se flota en el espacio haría que la sangre no se acumule.

Dentro de un traje espacial, el rigor mortis todavía se produciría, pues es el final de las funciones corporales.

Las bacterias intestinales también devorarían los tejidos blandos, pero estas bacterias necesitan oxígeno para funcionar correctamente y, por lo tanto, un suministro limitado de aire ralentizaría significativamente el proceso.