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¿Red Bull debería renovar al piloto mexicano?

por Enrique Herbert C.
24-08-2021

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Con la segunda mitad de la temporada 2021 de Fórmula 1 a punto de comenzar, los equipos se enfrentan a la decisión de elegir a sus pilotos para la siguiente campaña. La mayoría de los conductores prefiere tener claro su futuro pronto para prepararse para el próximo año, ya sea buscando y negociando algún asiento en otra escudería o al desarrollar el monoplaza para 2022.

Una de esas escuadras es Red Bull, que tiene claro que el holandés Max Verstappen seguirá siendo su cara ante el resto del mundo (tiene contrato hasta 2023), pero aún no se pronuncia sobre el futuro del mexicano Sergio 'Checo' Pérez, quien firmó sólo por este 2021, por lo que ambas partes deberían sentarse a definir la continuidad o el final de su relación.

A la mitad de la temporada, la empresa austriaca ya tiene argumentos para decidir tanto a favor como en contra de mantener al ex de Racing Point, quien ha ofrecido experiencia y consistencia en el automóvil azul, aunque también ha tenido problemas en algunas competencias.

En estas 11 primeras carreras con Red Bull, Checo ha confirmado una de sus mayores características: la capacidad de aportar puntos en cada carrera. Lo ha hecho en ocho de las competencias, en otras dos se quedó cerca, al ser 11 en Emilia Romagna y 16 en Gran Bretaña (tras una decisión en el paddock), mientras que en Hungría tuvo que abandonar por un contacto del finlandés Valtteri Bottas (Mercedes), para tener a su escudería a 12 unidades de las flechas plateadas.

El mexicano ganó en Azerbaiyán, apenas en su sexto Gran Premio en el monoplaza y fue tercero en la siguiente cita, en Francia, para dos podios que supieron a gloria en el garaje austriaco; además, tiene tres cuartos lugares, dos quintos (incluido su debut en Bahréin cuando salió desde el pitlane) y un sexto para sumar 104 unidades en la tabla, con el quinto puesto, detrás de sus rivales, el británico Lando Norris (McLaren), quien tiene 113 y Bottas, con 108.

La contratación de Sergio Pérez fue una apuesta de Red Bull para encontrar fuera lo que no pareció hallar con sus conductores jóvenes en las épocas recientes y hasta ahora ha rendido frutos. Tras las primeras 11 fechas del 2020, el tailandés Alex Albon registraba 64 puntos (casi 100 menos que Bottas, su rival directo) y sólo un podio; mientras que luego del mismo número de carreras en 2019, el francés Pierre Gasly acumulaba 55 unidades, cerca de 130 detrás de Valtteri, ambos lejos de lo aportado por su sucesor.

La incorporación del tapatío ha permitido que los dos autos estén más cerca, tanto en las distintas pistas, como en la tabla para hacerle frente al poderoso Mercedes, pero también tomar distancia de los equipos aspirantes, como McLaren y Ferrari, que ahora deben enfrentarse a ambos vehículos de la compañía.

Con 11 temporadas en F1, Checo ha entendido su rol en su nueva escuadra, que es el de sumar para el campeonato de constructores, pero también colaborar al título de su compañero Verstappen; de esta forma, el mexicano ha sido un buen escudero para el holandés y ha cumplido su papel sin protestar.

En Azerbaiyán, por ejemplo, se mantuvo segundo detrás de su coequipero, pero cuando éste sufrió una ponchadura, Pérez aprovechó el error de Hamilton para ganar. En el Gran Premio británico, Sergio sacrificó puntos personales para entrar a pits, cambiar llantas e impedir que Lewis se quedara con el punto extra por la vuelta rápida, una muestra de su entrega a la causa. A nivel personal, le ganó la batalla a Bottas por el tercer lugar en Francia, gracias a exprimir las llantas.

El problema de Sergio Pérez los sábados, que lo ha perseguido a lo largo de su carrera, se mantiene con Red Bull. En años anteriores se podía argumentar que el auto no podía rendir al máximo a una vuelta, pero en este caso su compañero ha demostrado que el diseño de Adrian Newey también cumple en la calificación, Verstappen ha salido en mejor posición que su coequipero en 10 de las 11 carreras disputadas hasta el momento.

Aunque Checo sabe remontar, no en todos los circuitos puede hacerlo, más allá de sus cualidades o las del monoplaza, como quedó demostrado en Portugal o Estiria, en donde partió en la cuarta posición y no pudo mejorar o lo ocurrido en Gran Bretaña, cuando ni siquiera se pudo colar a los puntos, luego de salir desde los pits, mientras Max lo había hecho en la pole, aunque el choque con Hamilton le impidió ver la bandera a cuadros.

Sergio ha cometido algunos errores en este comienzo de trayectoria junto a Red Bull que él mismo ha reconocido y que directivos como Helmut Marko, asesor de la escudería, no han dudado en señalar. En Emilia Romagna al rebasar por fuera de la pista recibió una sanción de 10 segundos que lo dejó fuera del Top 10, tras haber arrancado segundo.

La otra razón que podría dejar a Sergio sin su asiento en la marca de bebidas energéticas es el desempeño del mercado, en el que Red Bull podría encontrar una clara mejor opción respecto al mexicano (lo que no parece probable ante los movimientos que ya se anticipan) o que decida darle otra oportunidad a uno de sus jóvenes valores.

Gasly, de gran campaña en AlphaTauri, ha afirmado que podría hacer las cosas tan bien como Checo si tuviera una nueva chance, aunque no tiene el respaldo de los directivos, mientras que Albon espera paciente en la banca, al mismo tiempo que ha tenido un gran comportamiento con su reemplazo, según reconoció el tapatío; sin embargo, Pérez representa un avance respecto a lo entregado por sus antecesores y en el caso del otro piloto del grupo, el japonés Yuki Tsunoda, aún está en proceso de aprendizaje del serial.

Los argumentos a favor de la renovación de Sergio Pérez parecen ser más contundentes que los que están en contra; no obstante, el mexicano no cerró de la mejor forma la primera mitad de la campaña y el buen papel de Gasly provoca que su futuro dentro de la marca siga en duda, aunque todas las declaraciones dentro del garaje parecen apostar por su continuidad.