El senador Rafael Espino de la Peña consideró que el apoyo financiero, así como un régimen tributario sencillo y promotor de la inversión, representan la mejor plataforma para ordenar la actividad económica, promover la formalidad y estimular nuevos proyectos para el desarrollo equilibrado de las distintas regiones del país.
Durante la comparecencia de la secretaria de Economía, Tatiana Clouthier Carrillo, Espino de la Peña subrayó que el avance en la campaña de vacunación ha permitido la recuperación acelerada de la economía y del empleo.
Además, destacó los programas del bienestar que favorecen a la población de menores ingresos y reactivan el consumo, el ejercicio permanente de austeridad, la férrea disciplina y estabilidad con las que se han manejado las finanzas públicas
Rafael Espino de la Peña también subrayó que, con el aumento del 15 por ciento al salario mínimo, se acumula una recuperación del 44 por ciento del poder adquisitivo de las y los trabajadores en lo que va de la presente administración, algo muy trascendente si consideramos que de 1982 al 2017 perdió en términos reales un 82 por ciento de su valor.
El legislador de Morena dijo que ahora, más que nunca, debemos pugnar por alcanzar los objetivos prioritarios plasmados en el Programa Sectorial de Economía 2020-2024 para detonar el crecimiento; respetar los contratos celebrados para fomentar la seguridad jurídica y alentar la inversión.
Así como para impulsar la reactivación económica, el mercado interno y el empleo; y favorecer el desarrollo de la ciencia y la tecnología, con un énfasis especial en economía y gobierno digital.
Sin embargo, acotó, “debemos poner especial atención, pues si bien estamos recuperando empleos, 10.5 millones en el segundo trimestre del 2021, 8.2 millones o el 78 por ciento son informales, con ingresos precarizados y sin acceso a los sistemas de seguridad social”.
El senador destacó que durante años, México ha construído una red de 14 tratados comerciales que le permiten acceso en condiciones preferentes a más de 50 países y mil 300 millones de consumidores potenciales.
Dichos instrumentos nos han convertido en un país con una sólida vocación exportadora, abierto al mundo y fuerte en áreas de exportación específicas, como por ejemplo hortalizas frescas y frutas en el sector agrícola o la manufactura especializada en el sector maquilador.
Sólo el Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá, regula operaciones comerciales por más de 600 mil millones de dólares al año.
“Hoy estamos en posición inmejorable para recibir cuantiosa inversión extranjera derivada de la estrategia del “reshoring”o la relocalización en América de procesos de manufactura ubicados en Asia, que por la pandemia han visto alteradas las cadenas de valor”, subrayó.
Por estas razones, asentó Rafael Espino de la Peña, somos actualmente un país muy atractivo para la inversión, “lo que sin duda nos obliga a abonar con nuestros actos de gobierno a la certidumbre de los inversionistas, a guiarnos por las reglas acordadas para fortalecer los principios de seguridad jurídica que regulan las inversiones y las operaciones comerciales”.