logo
header-add

Cómo escapar (con gracia) de una cita que no va bien

por Redacción DC
27-01-2021

Comparte en

Conseguir una cita es el primer paso, el segundo es llegar al momento, descubrir que hay química y lograr que las cosas salgan bien, el problema es que nada está garantizado y esa cita que parecía perfecta se puede ir a la basura con un solo comentario fuera de lugar, una actitud o una elección desafortunada (además de que siempre existe la posibilidad de que la persona que se aparezca no sea exactamente lo que esperabas por su perfil o fotos).

¿Qué puedes hacer si una cita sale mal? No es lo más caballeroso del mundo salir de ahí y dejar a la otra persona sola sin una explicación, pero hay algunos casos en los que es la única opción para evitar un problema mayor y mantener tu salud mental intacta.

Hay muchas razones por las que las citas fracasan, pero hay cosas que puedes pasar por alto, como que no le guste el mismo equipo de fútbol, pero hay otras que son focos rojos que no debes pasar por alto, como el hecho de que ella no pare de hablar sobre los problemas con sus ex novios, que le grite a los meseros o que te deje saber que tiene alguna postura política o ideológica completamente ofensiva (no, salir con una racista definitivamente no es la opción).

Algunas citas no van a salir bien (incluso si no llegas al extremo de que ella te amenace de muerte si no le das la clave para desbloquear tu teléfono en ese momento), es posible que tu cita resulte ser una persona que simplemente no toleras (incluso sin una razón de peso) y quedarte ahí solo va a hacer que los dos pierda su tiempo (y el error podría estar desde lo que hiciste online antes de conocerla).

¿Tienes ganas de salir huyendo? Es normal, pero definitivamente no debes pararte con la excusa de que quieres ir al baño y no volver, hay que mantener cierto grado de educación hasta en las situaciones más complicadas y es mejor asegurarse de que ninguno de los dos salga herido emocionalmente de eso. Es simple, no hagas lo que no te gustaría que alguien te hiciera y pienses en la otra persona y la forma en la que podría reaccionar.

¿Cómo puedes salir de una cita terrible?

Intenta ser honesto

Tu primera ruta debe ser la honestidad, si no la estás pasando bien y crees que esa cita no va a llegar a ningún lado, habla con la otra persona, sin ser grosero (no se trata de herir sentimientos), y explícale que lo mejor es terminar la noche en ese momento. Para esto debes tomar en cuenta el tiempo, no lo hagas cuando lo que ordenaron acaba de llegar y definitivamente evita hacerlo cuando el mesero está en la mesa. Y debes permitir también que ella haga lo mismo si cree que la cita es un fracaso.


Usa una excusa sutil


Técnicamente es una mentira, pero a veces es mejor usar una excusa que decir algo que pueda dejar a la otra persona afectada, así que inventa que tu perro se escapó o que tu compañero de casa olvidó sus llaves y se quedó fuera. Si haces esto, debes ofrecerte a pagar la cuenta y el taxi para que ella pueda volver a casa.
Ten un plan antes de la cita

Si no quieres que sea obvio que estás poniendo excusas, lo mejor es que tengas un plan de contingencia en caso de que la cita vaya muy mal. Puedes decir desde el principio que tienes otra cosa que hacer después de la cita, que no puedes quedarte muy tarde porque tienes que levantarte temprano o hacer un plan corto para que la situación no se alargue demasiado, o incluso puedes decirle a tus amigos dónde van a estar y pedirles que lleguen al mismo lugar (obvio por coincidencia) para salvarte, así la conversación no se va a centrar solo en los dos.


Lleva una aspirina contigo

¿No quieres tener que usar una excusa demasiado obvia? Lleva siempre una cajita de aspirinas contigo y toma una cuando sientas que ya no puedas más, con un poco de suerte ella te va a preguntar si te sientes mal y será quien sugiera que terminen la noche antes de tiempo.


Una emergencia de trabajo

La vieja confiable, siempre hay algo que puede salir mal en el trabajo y es posible que tu jefe te necesite con urgencia para solucionarlo. Convence a un amigo de que te llame para que puedas llevar a cabo el plan y usar a un jefe malvado como pretexto para tener que volver a casa. Así puedes decirle a tu cita que te sientes mal de que la noche no haya funcionado como planeaban.