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EE.UU. envía 3.000 soldados para evacuar al grueso de su Embajada en Kabul

por Enrique Herbert C.
14-08-2021

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Ni Joe Biden ni su equipo se sienten en ningún modo responsables del hundimiento del precario estado afgano, construido durante dos décadas de guerra con un elevado precio de vidas y dinero.

«Son los líderes afganos los que tienen que unirse. Deben valerse por sí mismos, luchar por su país», dijo el presidente el martes.

Tras esas declaraciones, el Pentágono ha decidido enviar a 3.000 soldados a Afganistán para facilitar la evacuación parcial de la embajada de Estados Unidos en Kabul mientras los talibanes avanzan rápidamente hacia esa capital. La misión diplomática quedará en una dotación solo de emergencia.

Se trata de dos brigadas del Marine Corps y una brigada del Ejército, que se desplegarán en el Aeropuerto Internacional Hamid Karzai, según dijo ayer el portavoz del Pentágono, John Kirby. «Esta es una misión de alcance muy limitado para asegurar la reducción ordenada del personal civil fuera de Afganistán», dijo Kirby a los periodistas durante una conferencia de prensa.

Horas antes, la portavoz de la Casa Blanca, Jen Psaki, explicó que no habrá más operaciones de combate estadounidenses en Afganistán, a pesar del vertiginoso avance de los islamistas. De las fuerzas armadas afganas, Psaki dijo: «Tienen todo lo que necesitan. Lo que ahora deben hacer es determinar si tienen la voluntad política de defenderse, si pueden unirse para responder».

Momentos antes llegaban a la Casa Blanca noticias de que cientos de soldados afganos se habían rendido ante la guerrilla talibán en el norte del país, la parte desde la que comenzó la invasión estadounidense de 2001. Han caído ya en manos insurgentes una decena de capitales de provincia. La undécima es Herat, capturada según testigos citados por la agencia Ap, este jueves. Los talibanes dijeron que controlaban la ciudad tras el colapso de sus líneas defensivas. En Herat estuvo desplegado el ejército español, que participó de la misión en Afganistán hasta su regreso a casa el pasado mes de mayo.

Ante semejante debacle, la Casa Blanca dice ahora que su prioridad es un acuerdo diplomático. Así que esta semana, los portavoces de Biden han advertido a la guerrilla talibán de que puede quedar aislada en la comunidad internacional si no respeta las reglas del juego democrático. Según dijo Psaki el miércoles, «los talibanes también deben evaluar cuál quieren que sea su papel en la comunidad internacional»