logo
header-add

F1: No cualquiera detiene a Hamilton... Checo Pérez y su heroica defensa

por Redacción
13-10-2021

Comparte en

Hay que tener un par bien puestos, de manos, para evitar que Lewis Hamilton te pase en un Mercedes, en pista mojada y eso lo pueden hacer muy pocos en la Fórmula 1 como lo confeccionó el piloto mexicano Sergio Pérez. El volante de Red Bull se fajó con el siete veces campeón en la pista Intercity Park de Estambul y lo detuvo en lo que pretendía ser su camino al podio y en atacar a su coequipero Max Verstappen.

El ataque de Hamilton fue feroz, luego de que había largado en undécima posición, devoraba rivales uno a uno marcaba tiempos un segundo más rápidos que los de Pérez, quien rodaba en cuarto lugar tras una brillante largada.

El monoplaza Mercedes W12 fue el mejor todo el fin de semana. Una mezcla perfecta entre velocidad en las rectas con downforce en las curva. Checo Pérez vio reducirse su diferencia con Hamilton de 14 a menos de un segundo y desde la vuelta 32 de las 58 pactadas, Hamilton le llenaba los espejos.

En el giro 35, el embate de Hamilton tomó forma en la curva 12 donde se puso lado a lado del mexicano por la parte externa. Checo aguantó y el inglés lo orilló hasta la entrada de los pits pero de nuevo el de Guadalajara no arrugó. En la recta, el Mercedes mostró su poder, como también Pérez su valentía para irse profundo en la frenada y recuperar la posición que ya le había arrebatado Hamilton. Momento épico, que incluso en la transmisión de TV, Jenson Button campeón del mundo en 2009 y antiguo coequipeero de ambos pilotos, elogió.

La dificultad de mantener a raya a un piloto como Hamilton en una pista parte a medio secar, parte mojada y en otros sectores con lluvia; donde el agarre varía, con unas gastadas llantas intermedias, fue una verdadera proeza.

"Fue muy difícil, era cuando mi auto era más lento. Se trataba casi de sobrevivir", dijo Checo Pérez al propio Button, en entrevista posterior a la carrera.

La heroica defensa turca de Checo Pérez no sólo, de alguna forma dio luz para su, a la postre, décimo tercer podio de por vida en Fórmula 1, sino que también allanó el camino a Verstappen, quien fue segundo en la carrera, pero nunca tuvo el ritmo para pelear el primer puesto y podría haber sido amenazado por Hamilton de haber superado al jalisciense.

Hay que recordar que en Turquía no hubo, por la lluvia, el sistema que ayuda a que se den más rebases, el "DRS" (Drag Reduction System) que es cuando el alerón trasero se ajusta en algunas zonas de la pista, al estar un auto a menos de un segundo de distancia del otro, para reducir su resistencia al viento y hacerlo más rápido en rectas. Así que los rebases y defensas fueron puro y total manejo, a la vieja escuela.

El podio en Turquía fue un momento especial, pero más que el festejo con champaña y el trofeo, Checo Pérez se lleva de tierras otomanas un momento diferente al que arribó. Ahora la confianza está al alza, la demostración frente a Hamilton afianza eso y vale más porque es frente a uno de los mejores de todos los tiempos.

Lo importante para Pérez fue quitarse de encima el monolito de presión que lo agobiaba de cara a las seis carreras que restan en el calendario: Estados Unidos, México, Brasil, Qatar, Arabia Saudita y Abu Dhabi. Inercia positiva y reenfoque en los objetivos que son ayudar a Verstappen a ganar el Campeonato de Pilotos y conseguir el de Constructores.