Con la formalización de la rebaja en la tasa del Derecho de Utilidad Compartida (DUC) a Pemex de 58 a 40 por ciento para 2022, propuesta en el Paquete Económico del próximo año, se entregarían a la petrolera recursos por 80 mil millones de pesos adicionales, pero lo que preocupa es que el proyecto de ley no establece a cambio de qué, expresó Héctor Villarreal Páez.

El director del Centro de Investigación Económica y Presupuestaria (CIEP) dijo que preocupa que a Pemex se le están entregando recursos sin condicionalidades y sin cuidar los incentivos para que mejore su desempeño.

Expuso que Pemex debería ser capaz de disminuir sus déficits presupuestales. De no hacerlo, confirmaría que la estrategia de apoyos a la petrolera ha sido errada y costosa.

Adrián García Gómez, coordinador del área de ingresos e impuestos del CIEP, explicó que la disminución de la carga fiscal de Pemex por la disminución del DUC se hace con el propósito de incentivar mayor inversión en el sector.

Debido a que el DUC representa la principal fuente de ingresos del Fondo Mexicano del Petróleo (FMP), las ganancias petroleras se distribuyen a favor de Pemex y en contra del FMP, y podría tener otra consecuencia, ya que este fondo alimenta en un porcentaje al FEIP, el cual prácticamente se vació, por lo que su recuperación podría ser un poco más lenta.

Con esto, los ingresos de Pemex se incrementan 16 por ciento, mientras que los del FMP aumentan apenas 4 por ciento, estimaron los expertos.

En conferencia de prensa detallaron que el gasto dirigido al sector energético tendría en 2022 un aumento real de 6.5 por ciento, lo que equivale a 4.8 por ciento del PIB para 2022.

El mayor presupuesto es para Pemex, el cual representa 58 por ciento del total del gasto del sector y equivale a un aumento por 64 mil millones en su gasto de inversión, el nivel más alto desde 2015. Por su parte, la CFE aumenta su gasto total en 6.5 por ciento y representa 1.6 por ciento del PIB.

El CIEP estima que los ingresos públicos del sector energético, integrado por Pemex, CFE y el FMP, se estiman en 5.3 por ciento del PIB para 2022, lo que representa un aumento real de 7.3 por ciento.