Tokio confirmó mil 149 nuevas infecciones de COVID-19 este miércoles, la mayor cantidad registrada desde enero pasado, mientras la ciudad se prepara para los retrasados Juegos Olímpicos que comenzarán en menos de dos semanas.
La capital japonesa entró apenas el lunes en su cuarto estado de emergencia. La emergencia se llevará a cabo del 12 de julio al 22 de agosto, por lo que cubrirá todo el periodo de la justa deportiva, que ocurrirá del 23 de julio al 8 de agosto.
Japón se ha enfrentado a cuellos de botella en la distribución de vacunas debido a que su campaña de inoculación se aceleró en las últimas semanas. En total, Japón ha administrado 62 millones de inyecciones contra el COVID-19, suficientes para cubrir alrededor del 25 por ciento de la población, según el rastreador de vacunas de Bloomberg.
Los Juegos Olímpicos no contarán con espectadores en los eventos de Tokio, según se anunció el 8 de julio. Aquellos que ocurran en las prefecturas vecinas de Saitama, Chiba y Kanagawa serán en un cuasi estado de emergencia, por lo que tampoco habrá público.
Otras regiones, como Fukushima y Miyagi, ubicadas al noreste de Tokio, tendrán algunos espectadores.
El jefe olímpico Thomas Bach ha prometidono traer nuevos riesgos de virus a Japón, ya que alberga los juegos “más seguidos” de la historia, tratando de obtener más respaldo para un evento que recibió un tibio apoyo público y se vio empañado por una serie reciente de errores.
Japón ha reportado un total de 828 mil 169 casos de contagio a lo largo de la pandemia, así como 14 mil 943 muertes, de acuerdo con datos de Bloomberg.