El Centro de Derechos Humanos
Miguel Agustín Pro Juárez (Centro Prodh) señaló que la identificación genética
de los restos de Jhosivani Guerrero de la Cruz, normalista desaparecido de
Ayotzinapa “vuelve a evidenciar cómo se mintió a las familias y a México en el
pasado” con la llamada “verdad histórica”, pues el resto óseo fue encontrado en
un lugar diverso al que se postuló como paradero de todos los estudiantes en
esa versión.
En este sentido, el Centro
Prodh destacó que el hallazgo muestra que la identificación genética es
posible, incluso a pesar del paso del tiempo, por lo que se necesitan
mecanismos extraordinarios, masivos y con recursos para atender el rezago
forense en el país.
Además, el centro de derechos
humanos recordó que sigue pendiente avanzar en las investigaciones hasta llegar
a la verdad y sancionar tanto a los responsables de la desaparición como a los
de la manipulación del caso Ayotzinapa, pues los familiares de los desaparecidos
tienen derecho a la verdad.
La identificación
genética de Jhosivani fue realizada por la Universidad de Innsbruck y
verificada por Equipo Argentino de Antropología Forense (EAAF), y comunicada a
la familia durante el fin de semana por una comisión de sus representantes:
GIEI, la Comisión para la Verdad y Acceso a la Justicia del Caso Ayotzinapa,
Unidad Especial para el Caso Ayotzinapa de la Fiscalía General de la República